Pastor Armin Ihle, Premio Jerusalén

Este jueves 14 de agosto , la Organización Sionista del Uruguay entregará el Premio Jerusalénal Pastor Armin Ihle, una figura respetada, querida y justificadamente apreciada en la colectividad judía del Uruguay y el país en general. La congregación Evangélica Luterana que encabeza no es multitudinaria, pero su actividad se mide en lo que irradia , en los valores que lo motivan, y en lo que al pueblo judío respecta, en su sincera amistad y afán constante de diálogo y acercamiento.

Es un placer conversar con el Pastor Ihle. Combina a la perfección la profundidad de pensamiento, la experiencia de vida, con la picardía y gracia en  su forma de hablar.

Le agradecemos enormemente haber aceptado esta entrevista.

P: Pastor Ihle, nos convoca el Premio Jerusalén, pero es inevitable hacer referencia a lo que está pasando hoy en el país..Sin correr el riesgo de generalizar , lo cual sería no sólo injusto sino erróneo, hay sin duda preocupación en la colectividad judía, por el tono que ha adquirido la polémica a raíz de la guerra contra Hamas en Gaza. Y aunque lejos estoy de creer que cada crítica a Israel está motivada en antisemitismo, es indudable que hoy, hay expresiones antisemitas en Uruguay.¿Cómo se siente usted al respecto?

R: En estos días me asusto porque hay gente que utiliza estos dramáticos acontecimientos en Tierra Santa para expresarse en una forma antisemita. Cierto, se puede pensar políticamente diferente pero jamás se tiene que llegar al extremo de despreciar a la comunidad judía y al pueblo de Israel.

Los judíos han encontrado siempre puertas abiertas en nuestro país y yo espero y oro para que la noble tradición uruguaya, que se destaca históricamente por su carácter democrático y tolerante y por su libertad religiosa, siga también en el futuro.

UN GALARDÓN INSPIRADOR

P: De sus labios, a los oídos de Dios. Ahora sí Pastor Ihel…¿qué le inspira a usted este galardón?

R: Primeramente gratitud, a los judíos en Uruguay y también a los judíos de Jerusalén, que están dando este premio a un alemán , que es además pastor en la Iglesia Evangélica Luterana. Esto me hace sentir humildad pero también un profundo agradecimiento.

Además, pensando en los 20 años que estoy acá, sería vanidoso decir que “yo recibo” el premio. Creo que lo recibimos todos los que hemos trabajando en la Confraternidad Judeo Cristiana. Y estoy pensando que simbólicamente recibo el premio también en nombre de los fundadores, del Gran Rabino Fritz Winter, del sacerdote Asiaín y del Pastor Emilio Castro. Creo que ellos espiritualmente estarán presentes el 14 de agosto a las 20 horas, cuando en mi persona , se les honre también a ellos. Me siento llevado por la nube de los testigos. Y nombro a estos tres.

P: ¿Es problemático recibir hoy este premio, con todo lo que está pasando?

R: Estoy pensando en la sabiduría de Kohelet (Eclesiastés)  en cuyo tercer capítulo dice que “hay tiempo para sembrar, hay tiempo para cosechar, hay tiempo de nacer y hay tiempo de morir, hay tiempo de paz y hay tiempo de guerra”. Creo que sería cerrar los ojos recibir un honor solamente cuando las circunstancias son tan alegres. Lógicamente que hubiera sido mejor abrazar a toda la tierra Santa lo que hoy por hoy no es factible. Pero sabemos que los valores de las Sagradas Escrituras, del Tanaj y del Nuevo Testamento, están presentes, en justicia, en paz y en el deseo de salvaguardar la creación.

Que nadie me diga que las circunstancias no permiten entregar un premio, que yo no considero político, sino ético.

P: Volvemos inevitablemente a la actualidad…El problema es que la  situación en Gaza echó a andar una serie de manifestaciones , con tonos antisemitas en el peor de los casos…o antisionistas..

R: Jerusalénes eterna y para mí personalmente es la eterna capital de la tierra de Israel. Eso no significa que yo estoy de acuerdo con la política de cada gobierno. ¿Quién soy yo para criticar una política? No lo voy a hacer. Pero Eretz Israel (la Tierra de Israel ) es más que la coyuntura política de un momento.

En ese sentido, hablando del Río de la Plata, se puso una bomba a la AMIA. Murieron casi 80 personas en ese atentado. Creo que también en el Río de la Plata, necesitamos de la convivencia de la comunidad judía, en Montevideo, el interior, en toda América Latina, entre el ser buen uruguayo y ser buen judío. Y mi clara impresión  en base al conocimiento de la comunidad, es que eso se ha logrado. La comunidad judía aquí son  uruguayos, que también ama a la tierra de sus mayores, Israel, y a la ciudad que expresa la paz, Jerusalén.

URUGUAYOS Y JUDÍOS

P: Para los uruguayos judíos, judíos uruguayos, ese nunca fue un problema…Por un lado hay quienes tomaron, como opción de vida, radicarse en Israel. Por otro, también numerosos de quienes ni lo consideraron nunca, tienen un vínculo singular con Israel, como tierra de sus antepasados. ¿Cómo ve usted esa relación especial, ese poder amar a dos tierras? Se lo pregunto precisamente a usted, que no es judío, pero que conoce tanto a los judíos, y que no es uruguayo, pero conoce también a los uruguayos..¿Cómo se lo explicaría usted a otro cristiano, a un criollo, que no entiende la relación especial con otro país?

R: Primeramente lo observo como un historiador.

Hace 3 mil años se fundó Jerusalén. Los asirios, babilionios, griego. Romanos, y en el año 70 la destrucción y diáspora de los judíos. Siempre, en el segundo día del Pesaj, y no solamente en ese momento, “el próximo año en Jerusalén”.Eso es una convivencia que es parte del judaísmo. No creo que tener un nacionalismo que diga que en nuestro país debemos ser todos charrúas, sea positivo. Creo que la convivencia es rica para todos, para los criollos   y los judíos.  Uno enriquece al otro.

No se es menos uruguayo si uno está ligado a Israel.

Si me permite, le doy un ejemplo casi profano.  Usted sabe que soy alemán. En el reciente Mundial, cuando Uruguay hizo un gol, yo toqué la campana de la Iglesia. Lamentablemente no pude tocar tantas veces.(risa).

P: No ponga sal en las heridas…

R: Pues cuando los alemanes hicieron sus goles, especialmente los 7 contra Brasil, yo hice un campanazo por el cual la soga al final no podía más. Yo me siento realmente hombre de esta tierra, de Argentina, Paraguay, Uruguay, he vivido toda mi vida en Sudamérica. Pero no voy a perder mis raíces, que son alemanes, también en lo relacionado a la historia de Alemania. Respecto a los judíos, no siento en lo personal una culpabilidad por ser yo alemán, pero sí considero que tengo una responsabilidad .Creo que esto enriquece nuestra tradición, de donde vinimos, y también nuestra existencia, donde estamos.

Ya lo decía el profeta Jeremías al pueblo en el exilio de Babilonia: “Haga lo mejor para su ciudad”. Y yo veo: los judíos en el Uruguay hacen lo mejor para su ciudad.

ACEPTAR EL PREMIO JERUSALÉN

P:  Volvamos al Premio Jerusalén…Aunque usted es muy modesto…¿por qué le parece que usted se ha hecho merecedor de este premio?

R: Le contestaré con picardía…como hay elecciones este año, no se puede dar a un político. Pero bromas aparte, todo tiene su tiempo. Puede ser que ahora es el momento de un cristiano pastor, para un alemán. ¿No es una gran cosa que la comunidad judía nos da a nosotros la mano? No sé si otras personas, de otras naciones, lo pueden sentir como yo. Para mí es un acto  de generosidad.  Las naciones son realidades políticas y creo que ninguna nación está absuelta de culpa y pena. Pero esto no significa rechazar. Y en el caso de Israel, lo peor es rechazarlo con antisemitismo.

En el 1935 se hizo con las leyes raciales de Nuremberg. Hoy, para mí el antisionismo es una forma refinada de antisemitismo. Que no me diga la gente “no tenemos nada contra los judíos  pero no somos sionistas”. Yo digo que yo soy un cristiano sionista.

Israel tiene derecho de vivir en su tierra.Y si yo tomo la palabra Shalom, Paz, shalom no es solamente ausencia de la guerra sino que tiene grandes valores. En el shalom está el sistema social, en el shalom está también la seguridad en la frontera. El Shalom abraza toda una ética que se expresa en los mandamientos de la Torá. Estoy predicando…discúlpame…

P: Divino escucharlo Armin..no me convertiré al Protestantismo..pero que me encanta escucharlo, eso sí..

R: Por favor Ana..eso no..ya tengo suficientes problemas..(risa)

P: Le ahorraré otros nuevos entonces..Ahora, volvamos a mi pregunta anterior…dejando de lado el término temporal de por qué ahora usted …¿Qué siente que usted ha hecho, por qué brega,como para que la Organización Sionista del Uruguay haya pensado que usted es merecedor de este honor?

R: Creo que dos factores siempre han dominado mi vida. Uno, los derechos humanos. En la Argentina , hice mucho  trabajo con los refugiados y  siempre había también judíos entre ellos, que recibían más ataques que el resto. En Paraguay trabajé mucho con los presos políticos y también allá los judíos  siempre sufrían más presiones. Yo hablé con algunos en la cárcel en aquel momento, y sufrían a veces más que otros. Muchas veces tenía que cruzar el charco de Argentina para venir a Uruguay.O sea que en todo este tema, seguí una línea clara por la que quizás hay un reconocimiento.

P: Así debe ser..

R : Perdona que lo cuente, pero hace poco salió un libro en Paraguay, titulado “Armin Ihle, pastor de los derechos humanos”..

P: Es justo que se sepa.

R: Lo otro es que siempre he trabajado en el ambiente ecuménico.En Argentina, con otras iglesias evangélicas y con los católicos. En el Paraguay, un obispo católico , un pastor evangélico y yo, los tres, fuimos honrados en la democracia con la ciudadanía honoraria paraguaya.  Hemos tenido siempre la línea de defensa de los derechos humanos y lo ecuménico, no me encarcelé en mi pequeña congregación. Yo soy con todo el corazón el pastor de la Congregación Evangélica alemana de Montevideo, pero eso no es lo absoluto. Lo absoluto es Dios y sus hijos, y que se expresen en los diferentes credos.

Desde hace ya 20 años,en Uruguay,  siempre tuve lo que se puede llamar suerte, destino, don de gracia, de mi encuentro con el judaísmo. Yo fui una de las personas que iba a visitar al rabino Fritz Winter.¡Qué gran hombre! Hablamos horas sobre la relación entre cristianos y judíos. Y dado que él tenía el mismo acento en castellano que yo, preferíamos hablar en alemán, pero no de nuestros lugares de origen ni de Kant…sino de su primera Bar Mitzvá en Cochabamba. O sea que yo entré al mundo del judaísmo también por experiencias personales.

Y quisiera mencionar a alguien en especial. Una de las diez personas a quienes yo miro hacia arriba, tengo que mencionar a Jacobo Hazan, de quien aprendí mucho.

Y así fue siempre nuestro diálogo con los católicos, anglicanos, con los otros evangélicos y con los judíos. Y somos todos una familia. No unificada. Pero en unión. Y eso me parece que es una gran cosa. Le digo que este año, la conferencia juvenil del International Council of Christians and Jews es en Uruguay. Y esto es porque la Confraternidad Judeo Cristiana  del Uruguay está trabajando y quiere ser una bendición para todo Uruguay Y quiere dar un testimonio de justicia y de paz.

DIÁLOGO JUDEO CRISTIANO EN EL URUGUAY

P: Justamente le quería preguntar cómo ve usted dónde está hoy el diálogo judeo-cristiano en Uruguay..

R: El 13 de agosto tenemos acá en mi iglesia una disertación sobre el tema “Montevideo: capital del diálogo entre las religiones”. Va a venir el Arzobispo Sturla, un hombre muy abierto al judaísmo, el Pastor presidente de mi iglesia, de Buenos Aires , el uruguayo Carlos Duarte, y el rabino Ariel Kleiner de la NCI. ¿Le parece que esto habría sido posible hace unos años?

Es claro que el trabajo entre las religiones es un trabajo no de grandes éxitos..Nunca es un trabajo llamativo en la sociedad. Pero es un trabajo que con los más de 50 años que ya lleva, ha dado sus frutos. Dejemos de lado a cristianos y judíos…creo que Uruguay puede estar orgulloso de tener un diálogo entre las religiones, como tenemos aquí.

Podemos tener siempre a la vista, que no es un diálogo de la elite sino que queremos llegar también a la gente de a pie, que llegue a todos, que todos lo noten. Creo que este diálogo tiene sus frutos..los molinos de Dios trabajan lento..pero yo realmente veo frutos.Gracias a los padres que tuvimos y a la segunda y tercera generación y a los jóvenes que vendrán también de Argentina, Chile, Brasil y otras partes del mundo..es un diálogo muy rico. No hay que ver las cosas solamente del punto negativo.

P: ¿Qué siente usted que hay en común entre su fe y el judaísmo y qué es lo que más lo separa?

R: Lo que nos une es el Dios de Abraham, Isac y Jacob. Lo que nos une es el Tanaj, que tienen los cristianos en su totalidad, como Escritura. El Pentateuco, los Profetas, todo es también la fe de un cristiano. Eso me une con los judíos. Palabra por palabra, lo que está en el Tanaj.

Lo que me separa es Jesucristo. Yo creo en este Jesucristo y no voy a obligar a ningún judío a creer también en él. En la Confraternidad nunca ha tratado de negarme la fe en este Jesucristo.Podemos unirnos en lo que dice Jesús, eso sí, por ejemplo el Sermón de la Montaña.Pero el Cristo resucitado, en él está nuestra diferencia.Y creo que sería falso tratar de armonizar eso.

Creo que es mucho más lo que nos une, pero Jesucristo es un testimonio mío, como cristiano.

LA ESPERANZA

P: ¿Hay algo que quisiera agregar Pastor Ihle?

R: Uno no puede hablar del Premio Jerusalén sin pensar en la guerra en Tierra Santa.Yo oro para cada judío, y también para el pueblo palestino. La vida es la creación de Dios. Tú sabes bien mi defensa del pueblo de Israel y defiendo  que el pueblo de Israel tiene derecho de defenderse. También oro por cada uno que muera en Gaza. Estoy convencido que llegará el momento que llegue el Shalom . “Van a secar todas las lágrimas”…se dice. Y espero que eso llegue una vez. Mientras tanto, hay que trabajar.

Quiero que quede bien clara mi posición: el  Hamas es lo más perverso que puede haber. Manda a los niños, coloca cohetes bajo hospitales, en mezquitas…Es lo más perverso que hay. No se puede justificar con nada. Eso no quita que si muere un niño, me da un gran dolor.

P: Sería inhumano que no doliera. Ojalá se cumpla la profecía de la paz. Y que todos podamos verla. También usted, con su merecido Premio Jerusalén. Gracias Pastor Ihle. Gracias por su tiempo y por esta entrevista, de todo corazón.

R: Muchas gracias a ti Ana.